Juan José Llamedo González, profesor del Instituto Superior de Ciencias Religiosas de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia, presenta el miércoles 28 de mayo el libro «El Credo Niceno-constantinopolitano. Comentario al Símbolo de la fe 1.700 años después del I Concilio de Nicea».
El I Concilio de Nicea marcó un antes y un después en la vida de la Iglesia. Desde entonces, millones de cristianos de todos los rincones del mundo han rezado el mismo símbolo de fe. La obra publicada por la Editorial San Pablo pone de manifiesto, frente a las divisiones y reduccionismos, la importancia del Credo como llamada de fidelidad a la fe apostólica, de fidelidad a la voluntad de Dios que incluye la unidad visible de la Iglesia. El autor nos propone volver a Nicea con espíritu de discernimiento en una reflexión que tiene como finalidad conocer, comprender, profundizar y rezar el Credo.
«Hace seis años comencé un estudio contemplativo, orante, del Creo Niceno-constantinopolitano. Y poco a poco fui descubriendo su riqueza e importancia», señala Llamedo. «Cuando se convocó el Año Santo 2025 me di cuenta que era el momento de publicar todo lo reflexionado: los 1.700 años del I Concilio de Nicea lo merecían», añade.
El obispo auxiliar emérito de Valencia Javier Salinas participará en una presentación que se desarrollará en la parroquia de Nuestra Señora de la Esperanza de Valencia (Avda. Pesset Aleixandre, 130, Valencia), cuyo párroco es el propio autor Juan José Llamedo. Comenzará a las 19:30 horas.
La obra hace un acercamiento al Credo desde la perspectiva histórica, no tanto para conocer la historia de la Iglesia del siglo IV, sino para situar y contextualizar el ambiente y las razones por las que la Iglesia se dotó de un instrumento como este. Después propone un amplio comentario al Credo, desgranando su sentido, frase por frase, y favoreciendo la reflexión para profundizar, personal o grupalmente, en la materia.
El texto se ha elaborado con «el deseo de volver a las fuentes de la fe y a la unidad visible de la Iglesia». Para Juan José Llamedo, el resultado ha sido un «libro-icono para pensar, orar, compartir… Un libro fruto de la contemplación del misterio de la fe, desde el símbolo que hace 1.700 años es patrimonio de todos los cristianos».
